A partir de este año, todos los deportistas profesionales, ya sean nacionales o internacionales, podrán consumir aceite de cannabis para calmar sus dolores, siempre y cuando el producto que utilicen no contenga THC, el componente psicoactivo del cannabis.
La Agencia Mundial de Antidopaje, organismo internacional que tiene a su cargo la regulación de las sustancias prohibidas y permitidas en todos los deportes y países, publicó el 1 de enero un documento en el cual confirmó lo que había anunciado algunos meses atrás: que los deportistas -cualquiera sea su disciplina- no serán sancionados por utilizar cannabidiol, también conocido como CBD.
La decisión no implica que los deportistas puedan consumir cannabis en cualquiera de sus formas ya que, al mantenerse la restricción sobre el THC, los deportistas no podrán fumar, vaporizar, ni utilizar aceites artesanales que tengan una dosis mínima de la sustancia prohibida.
De esta forma, lo que se permite es el consumo de productos medicinales elaborados a partir del cannabis, que no son alucinógenos y que se utilizan fundamentalmente para calmar dolencias físicas. La manera más extendida de consumir es a través de aceites, aunque también existen cremas, tinturas y productos para vaporizar.
